Miramos por el retrovisor para recopilar los que, según nuestro criterio, son los 10 momentos más destacados de la escalada en 2018. No ha sido fácil confeccionar esta lista y fuera se han quedado muchísimos momentos especiales del año.
Pensamos en Ignacio Mulero y la primera repetición de The Meltdown 9a; en las más de 4.000 vías de octavo grado o más encadenadas por Dani Andrada; o en la reciente ascensión de Artaburu por Iker Pou, pero solo podíamos escoger 10…
Los 10 mejores momentos de la escalada en 2018
1. Adam Ondra encadena Supercrackinette 9a+ al flash
La noticia saltaba el 10 de febrero por la noche. Adam Ondra había encadenado el primer 9a+ al flash de la historia de la escalada con Supercrackinette. Fue en el sector Praniania, en la zona de Saint Leger du Ventoux (Francia).
Ondra llevaba mucho tiempo buscando el 9a+ al flash. Lo había intentado anteriormente con Selecció Anal, en Santa Linya, y con Biographie, en Céüse. En octubre de 2012 el checo encadenó en ese estilo Southern Smoke Direct, en Red River Gorge, pero fue honesto y la rebajó del 5.15a (9a+) al 5.14d (9a). Con Supercrackinette finalmente llegó el momento.
2. Tommy Caldwell y Alex Honnold baten el récord de velocidad en The Nose
Tommy Caldwell y Alex Honnold nos mantuvieron entretenidos durante los primeros días del mes de junio. En el lapso de una semana escalaron hasta en tres ocasiones The Nose lo más rápido que pudieron.
En su tercera escalada de velocidad, el 6 de junio, Caldwell y Honnold consiguieron bajar de las 2 horas, parando el cronómetro en la cima de El Capitan en 1 hora 58 minutos 07 segundos, estableciendo el récord de velocidad en The Nose.
3. Alex Megos y Stefano Ghisolfi encadenan Perfecto Mundo 9b+
Alex Megos llegó, escaló y venció. El alemán necesitó poco menos de un mes para llevarse la primera ascensión de Perfecto Mundo 9b+, en el Racó de la Finestra, en Margalef. El rotpunkt llegó el 9 de mayo.
Para Alex Megos fue su primer 9b+ encadenado, entrando a formar parte del selecto club del 9b+ junto a Adam Ondra y Chris Sharma. Unos meses después, este mismo diciembre, se sumaba un nuevo miembro… Stefano Ghisolfi también le ponía el punto rojo a la vía más dura de Margalef, cerrando su mejor año como escalador profesional.
4. Keita Kurakami y Connor Herson escalan The Nose en libre
La vía más popular de El Cap, The Nose, ha visto varios intentos de ascensión en libre durante 2018, aunque tan solo lo han conseguido dos escaladores. Además lo han hecho con estilos diferentes.
El primero en conseguirlo fue el japonés Keita Kurakami, que lo hizo en solitario autoasegurándose. Kurakami ya había escalado la vía en libre en 2017 pero su ascensión no se consideró del todo válida porque subió a la cima a descansar durante su intento desde el suelo. En noviembre no perdonó, pasando cinco días en la pared para encadenar en libre la vía, tal y como nos explicaba en la entrevista que mantuvimos con él.
Un día después de que Kurakami llegara a la cima de El Capitan, lo hacía Connor Herson. El joven de 15 años se convertía en la persona más joven en escalar The Nose en libre. Beth Rodden tenía 25 años cuando la escaló en el mismo estilo con Tommy Caldwell, en 2005, mientras que Lynn Hill tenía 32 cuando la liberó por primera vez, en 1993.
5. Adam Ondra encadena la primera vía de varios largos de 8c a vista
Adam Ondra ha sido protagonista por partida doble en los momentos más destacados para la escalada en 2018. Como preparación para su intento a vista en Salathé Wall, en El Capitan, el checo escaló algunas vías duras de varios largos en Croacia.
La noticia saltó cuando Ondra consiguió encadenar a vista Spomin (350m, 8c), en Paklenica. Fue la primera vez en la historia de la escalada que se conseguía encadenar una vía de varios largos de 8c en ese estilo.
6. Kaddi Lehmann, segundo 8C femenino de boulder con Kryptos
Sin hacer mucho ruido, Kaddi Lehmann encadenaba a mediados de junio Kryptos 8C, en Balsthal (Suiza). Se convertía así en la segunda mujer capaz de alcanzar esa dificultad en boulder. La primera que lo hizo fue Ashima Shiraishi en 2016, cuando tenía 14 años.
La escaladora alemana había probado el bloque por primera vez en 2017, y aunque le pareció imposible, se convirtió en una obsesión para ella. La motivación y la fuerza de voluntad no tienen límite.
7. Daniel Woods, el escalador con más problemas de boulder de 8C+ del mundo
Daniel Woods encadenó su cuarto problema de V16 (8C+) con Box Therapy, en Box Lake, en Rocky Mountain National Park (Colorado). Además fue una primera ascensión, la tercera en ese grado para Woods después de sumar anteriormente en la misma zona Creature From the Black Lagoon y Hypnotized Minds.
Fuera de RMNP el norteamericano ya contaba también con el V16 de The Process, en Bishop. Con estos cuatro problemas de dificultad extrema, Daniel Woods se ha convertido en 2018 en el único escalador del mundo en atesorar cuatro bloques de 8C+ encadenados.
8. Jan Hojer, segunda repetición de Es Pontàs 9a+/b
Jan Hojer firmó la segunda repetición de Es Pontàs 9a+/b, en la isla de Mallorca, a principios de octubre. Tres ascensiones en 12 años para esta king line de psicobloc de Chris Sharma evidencian su dificultad, que estaría entre el 9a+ y el 9b.
El alemán ya había probado intensamente la línea en 2016, cuando la encadenó su amigo Jernej Kruder, quien comentó que “podría acercarse al 9b”.
9. Barbara Zangerl y Jacopo Larcher repiten Odyssee (1.400m 8a+) en el Eiger
Barbara Zangerl y Jacopo Larcher repitieron en libre Odyssee (1.400m 8a+), en la cara norte del Eiger (3.970 metros), en los Alpes suizos, a finales de agosto. Los dos escaladores encadenaron todos los largos duros como primeros de cuerda y se alternaron en los fáciles. Estuvieron cuatro días en la pared.
Odyssee es la vía más dura de la norte del Eiger y surca el intimidante desplome del Rote Fluh. Roger Schaeli, Robert Jasper y Simon Gitel abrieron la vía entre 2009 y 2015, y la liberaron posteriormente. La apertura y encadenamiento de Odyssee desbancó a Paciencia (900m 8a), que hasta entonces era la más difícil del Eiger.
10. The Recovery Drink, Meltdown y Magic Line, las fisuras más duras del mundo
2018 ha sido sin duda el año de las fisuras más duras del mundo. Tres vías han compartido el protagonismo. Primero fue The Recovery Drink, en Jossingford (Noruega), que repitió por primera vez Daniel Jung.
Nico Favresse se hizo con la primera ascensión en 2013, y aunque no se pronunció sobre el grado, sí que comentó que era más difícil que Cobra Crack 5.14b (8c), la fisura de dedos de Squamish. El 8c+ parece ser el grado aceptado para The Recovery Drink después de la repetición de Jung y los intentos todavía sin rotpunkt de Tom Randall y Pete Whittaker.
El mes de noviembre trajo dos nuevas ascensiones muy esperadas. Fueron las primeras repeticiones de Meltdown y Magic Line. Carlo Traversi conseguía repetir Meltdown 10 años después de la primera ascensión a cargo de Beth Rodden, en febrero de 2008.
Meltdown se encuentra en un idílico rincón de la Upper Cascade Creek, en Yosemite. En su día, Beth Rodden no quiso graduar la fisura al encadenarla. A pesar de ello, el paso del tiempo y la ausencia de repeticiones daban por hecho que se encontraría en un rango alto, muy alto, de dificultad, que rondaría el 5.14c (8c+).
Pocos días después, Lonnie Kauk encadenaba Magic Line, en la zona de Vernall Falls, también en Yosemite. El hijo del legendario Ron Kauk, que escaló la fisura por primera vez en 1996 dándole un grado de 5.14b (8c), ya había encadenado la vía en 2016, pero lo hizo igual que su padre: con los seguros previamente emplazados. No satisfecho con eso, Lonnie decidió volver para ascenderla en el mejor estilo, poniendo los seguros de primero.
Respecto al grado –según explicó Rock & Ice-, Kauk dijo que iría al alza instalando el material de primero y que se merecería el 5.14c (8c+).