Jonatan Flor ha hecho un paso más en su carrera como escalador al encadenar La Planta de Shiva 9b, en Villanueva del Rosario (Málaga). Es el segundo 9b de su libreta tras tachar durante el verano de 2019 Ali Hulk Extension Total sit start, en Rodellar.

Natural de Elda (Alicante), Jonatan tiene 24 años y se inició en la escalada a los 7, como muchos otros, saliendo a la montaña con su padre. Entre 2013 y 2017 encadenó varias vías entre el 8c+ y el 9a, como Palestina o El Intento, en Cuenca, o La Negra, en Gandía. En 2018 consiguió sus primeras vías de 9a consolidadas con Seta Total y Leire, también en Cuenca.

La resina tampoco se la ha dado mal a Jonatan. En 2017 abandonó la escalada de competición y dejaba tras de sí un palmarés realmente destacable: dos campeonatos de España de boulder, en 2016 y 2017, y cuatro veces campeón de forma consecutiva de la copa de España, en la misma especialidad, de 2014 a 2017. Jonatan también vistió la camiseta de la selección española de escalada y en 2017, por ejemplo, consiguió colarse en la semifinal de la prueba de la Copa del Mundo de Boulder que se disputó en Múnich.

El boulder, y ya en roca, también le ha dado visibilidad en los medios al alicantino. En enero de 2017, en plena forma durante los periodos de competición, realizó la primera repetición de Crisis 8C/+, en Crevillente, y en septiembre de 2018 repitió La Teoría del Todo 8B+, en Albarracín.

Flor explotó definitivamente como escalador en roca con proyección internacional tras encadenar No Pain No Gain, en Rodellar. Fue su primera vía de 9a+ y así empezaba un verano de los que no se olvidan en la escuela oscense.

La Planta de Shiva ha sido un escalón más en la progresión de Jonatan Flor, que aún parece estar bien lejos de su límite. Hablamos con Jonatan para conocer algunos detalles más sobre su segundo 9b.

Dos meses centrado en la vía, según has explicado.

Empecé a probar la vía a principios de octubre, pero a pesar de que tenía claro que era mi principal objetivo en Villanueva del Rosario, durante los primeros días allí no la probé mucho. Estuve haciendo otras vías, algunas, por ejemplo, a su izquierda que compartían la parte final.

Entonces, ¿cuál fue tu estrategia a la hora de afrontar el proyecto?

Combiné otras vías con el trabajo del segundo largo de La Planta de Shiva, donde está lo más duro. Una vez conseguí tener la segunda tirada matizada fue cuando realmente me centré solo en ella.

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«En los intentos gastaba mucha piel y tuve que reposar más de lo que me habría gustado»

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Dices que es la vía que más de ha costado hasta la fecha. ¿En qué sentido?

La parte psicológica ha sido lo más difícil de llevar. La fama de la vía me ha condicionado y me ha metido presión. Las condiciones meteorológicas tampoco han sido las mejores desde que llegué aquí. En octubre las condiciones fueron buenas pero aún me encontraba en proceso de probar la vía, descifrar métodos y demás. Cuando ya la tenía cerca, en noviembre, el tiempo no acompañó. La humedad me puso las cosas muy difíciles. No la podía probar mucho y en los intentos gastaba mucha piel y tuve que reposar más de lo que me habría gustado.

Con La Planta de Shiva liquidada, ¿qué toca ahora?

Pues más que pensar en otra vía dura me apetece escalar y disfrutar todo lo que pueda. El último mes probando solo el 9b me ha desgastado y a corto plazo solo pienso en escalar vías más fáciles.

Te mueves principalmente por España para escalar. Cuando la situación que ha provocado la pandemia empiece a remitir, ¿te gustaría viajar a algún otro lugar para probar otras líneas duras?

Sí, cuando todo esto pase uno de los lugares que me gustaría visitar es Francia. Esperemos que sea pronto, será buena señal.