Sébastien Berthe, en libre y en el día ‘El Niño’ 5.13b/c por la variante ‘Pineapple Express’
El belga invierte diecisiete horas para encadenar los 950 metros de la vía establecida por los hermanos Huber y siguiendo la variante que visionó Sonnie Trotter
Sébastien Berthe ha escalado en libre y en el día El Niño 5.13b/c (8a/+), en El Capitán. El belga ha necesitado 17 horas para completar la vía, perdonando en su intento media a vista medio al flash, que se le ha escapado por muy poco. Berthe ha optado por seguir la variante Pineapple Express, que estableció Sonnie Trotter en noviembre de 2018, evitando el rápel que los hermanos Alex y Thomas Huber idearon para liberar en 1998 la línea de 950 metros.
«Intentar a vista/al flash una vía en libre en El Capitán y en el día siempre había sido un sueño para mí, aunque no me atreví a marcarlo como uno de mis objetivos. Aun así, hace dos día me di una oportunidad a mí mismo. Fui a muerte y estuve cerca de conseguirlo con ‘El Niño’ a través de la variante Pineapple Express. Solo había visto algunas fotos y vídeos cortos y tenía información sobre donde estaban las secciones más duras», ha explicado Seb.
Al belga le ha acompañado Soline Kentzel, que en esta ocasión ha estado siempre en la punta inferior de la cuerda, a diferencia de lo que sucedió hace pocos días, cuando fue la francesa la que lideró en su mayor parte la ascensión en libre que protagonizó en Golden Gate. «Como ya es habitual en El Cap, hemos tenido buenas dosis de aventura, con roca mojada, roca suelta en ocasiones o escalando en la oscuridad», ha precisado con humor el belga.
Así ha relatado Sébastien Berthe su intento a vista/al flash:
«Escalé con fluidez y pude flashear o encadenar a vista cada largo (incluyendo los primeros cinco 5.13) hasta que llegué al largo 23, Eismeer, el último 5.13 duro. En este punto puedes seguir a la izquierda por Lucy is a labrador 5.13a (7c+), que estaba completamente mojado, o por la derecha y atacar Eismeer. Ese largo es muy a bloque y es incluso más duro que originalmente ya que se rompió un agarre. Escogí tirar por la derecha y luché, aunque no pude descifrar el método en mi intento a vista y acabé cayendo. Después de varios intentos puede quedarme de la regleta clave y encadené. En la reunión tenía un sentimiento agridulce. Había encadenado todos los largos duros pero el a vista se había escapado. A pesar de ello, aún tenía una oportunidad si seguía por Lucy is a labrador. Así que decidí bajar e intentarlo. Había caído la noche. Tuve que encender mi frontal y empecé a escalar la travesía, que estaba completamente mojada. Tras luchar brevemente con unos pequeños agarres que chorreaban, acabé resbalando y cayendo. Mentalmente no podía más. Acabamos la vía siguiendo por Eismeer, finalizando la ascensión a las 11h de la noche, después de 17 horas en la pared».
No es la primera ocasión que alguien escala en libre y en el día esta vía del valle de Yosemite. Sonnie Trotter, primer ascensionista de esta variante de El Niño, la encadenó en 13 horas, con Tommy Caldwell al otro lado de la cuerda, mientras que Alex Honnold y Brad Gobright, los primeros repetidores, la escalaron en libre en 14 horas y media.
Sébastien Berthe renuncia al Dawn Wall, de momento
Sébastien Berthe llegó a Yosemite el pasado invierno con un objetivo bien claro: repetir Dawn Wall. Esta vía de 950 metros y dificultades de hasta 5.14d (9a) se considera el big wall más duro del mundo. Con primera ascensión en libre de Tommy Caldwell y Kevin Jorgeson en enero de 2015, a día de hoy solo cuenta con la repetición de Adam Ondra, que la encadenó en noviembre de 2016.
Berthe unió fuerzas con su compatriota Siebe Vanhee, con quien estuvo trabajando la vía dos meses, hasta que Siebe tuvo que volver a Bélgica por motivos laborales. Seb seguía motivado y apoyado por otros compañeros, decidió realizar un intento desde el suelo.
Después de 23 días en la pared, de los que descansó 12 e invirtió numerosos intentos en el L14, Sébastien Berthe decidió abandonar Dawn Wall por esta temporada. «Encadenar Dawn Wall en una temporada era un objetivo muy ambicioso y estuve realmente cerca, pero no pude atrapar el momento. Veremos si el viento me vuelve a traer aquí en los próximos años para otro intento», comentó con una visión optimista.