Laura Rogora se ha apuntado la primera ascensión de Réveille-toi 9a, en la Cueva di Collepardo, en Collepardo (Italia). La vía era un antiguo proyecto de la cueva que Rogora llevaba varios meses probando de forma intermitente. Con la propuesta de 9a para Réveille-toi, ya son seis los novenos encadenados por Rogora, que en mayo cumplió 18 años.

La italiana empezó el 2019 consiguiendo la tercera ascensión femenina de Esclatamasters 9a, en Perles. Precisamente, un mes antes de encadenar Esclatamasters, en diciembre de 2018, Rogora realizó grandes avances en Réveille-toi y empezó a sentir que la línea era posible. Ya en 2019, en febrero, consiguió un high point en la vía, aunque tuvo que apartar el proyecto para centrarse en las competiciones.

Con la Copa del Mundo de boulder de la IFSC sentenciada a favor de Janja Garnbret, Laura Rogora ha cambiado la roca por la resina unos días antes de empezar los entrenamientos de dificultad, para afrontar así la segunda parte de la temporada. Y ha tenido su recompensa.

La Cueva di Collepardo, un sector joven

La Cueva di Collepardo es un sector de escalada relativamente joven. Localizado en la población de nombre homónimo, dentro de la región del Lacio, cuenta con unas 30 vías entre el 6b+ y 9a.

La cueva, desarrollada por Domenico Intorre y Nando Zanchetta, consta de dos partes diferenciadas. En la parte izquierda de encuentran las vías más largas y de resistencia, mientras que en la derecha las líneas son más cortas y a bloque.