Adam Ondra ha realizado la primera ascensión de Bomba, en Arco (Italia). La vía se encuentra en el sector Hotel Olivo y la equipó el propio Ondra en 2012. «La línea es evidente y entonces pensé que era imposible, pero 10 años más tarde he conseguido encadenarla», ha comentado el escalador checo.

Respecto al grado, Adam ha lanzado una propuesta de 9b. Inicialmente pensaba que podía alcanzar el 9b+, pero poniendo sobre la mesa todas las variables y tiempo que ha invertido en la vía, ha acabado decidiendo no darle ese plus: «Desafortunadamente no puedo darle 9b+ ya que me llevó cinco días limpiarla y probarla (más unos días más probando una variante vecina), aunque creo que está en la parte alta del grado. Se ajusta a mi estilo: rodillas de truco para reposar y movimientos muy largos sobre presas pequeñas. Creo que se puede separar probablemente en un 8b+ con algunas rodillas (que te permiten coger aire), hasta una sección muy específica de 10 movimientos que puede ser 8C por sí misma. Ahí te encuentras con un movimiento con una mala rodilla utilizando un pequeño bulto y entonces llega un gran cruce a una regleta de 7 milímetros y un último y angustioso movimiento a un tridedo horizontal».

Hace solo un par de semanas el checo también tachó en Arco Trofeo Dell’Adriatico 9a+, una vía equipada por David Lama con primera ascensión de Gabriele Moroni. La de Ondra fue la primera repetición.

Con la ascensión de Bomba Adam Ondra pone punto y final a otro viaje a Arco, su segundo hogar, donde también ha estado probando junto a Jakob Schubert y Stefano Ghisolfi un proyecto llamado Excalibur, sobre el que se especula que podría ser lo más duro de la zona.