Innsbruck ha acogido la primera prueba de la Copa del Mundo de Dificultad de la temporada entre los días 23 y 25 de junio. La ciudad austriaca se ha convertido esta semana en el epicentro mundial de la escalada de competición, con más de 350 participantes entre todas las pruebas en juego.

Se acercan los Juegos Olímpicos de Tokio y la cita de Innsbruck ha servido para comprobar en qué momento de forma se encuentran todos los atletas que estarán allí presentes en lo que a la disciplina de dificultad se refiere.

La International Federation of Sport Climbing (IFSC) ha sido capaz de mejorar un año más la realización del streaming. Se ha presentado a todos los finalistas con nuevas estadísticas y antes del inicio de la competición un gráfico en tres dimensiones ha mostrado las dos vías de la final, una para las mujeres y otra para los hombres, divididas por secciones y explicando los diversos estilos de escalada.

Los comentarios de la retransmisión han corrido a cargo de Matt Groom y el escalador israelí Alex Khazanov se ha encargado de los apuntes técnicos.

Janja Garnbret vuela en la final

Un dinámico en la primera sección, seguido de una parte física e intensa de unos 20 movimientos y de nuevo un dinámico antes del top. Así ha sido la vía femenina de la final.

Eslovenia ha conseguido colocar a tres escaladoras en las finales, entre ellas la máxima favorita, Janja Garnbret, que ha competido en último lugar ya que había pasado como primera clasificada en las semifinales.

Miho Nonaka ha abierto la final y tras resolver el primer dinámico de la vía ha quedado claro que ese movimiento iba a dar mucho que hablar. Nonaka ha caído más arriba, en el siguiente paso clave, donde había que cerrar con decisión una pequeña regleta.

Dos de las claras aspirantes a estar en el podio, Laura Rogora y Lucka Rakovec, han fallado en la recepción del primer dinámico, hecho que las ha relegado a las dos últimas plazas de la general en la final. Vita Lukan, a pesar de haber superado ese paso clave ha caído seis movimientos más arriba, en un error de colocación.

Viktoriia Meshkova, revelación en el último Campeonato de Europa de escalada, en el que consiguió un billete para Tokio, ha protagonizado un buen papel en la final, ocupando la cuarta plaza.

Akiyo Noguchi ha sido la primera escaladora en las finales que ha marcado el mejor high point. Noguchi ha escalado dando una lección de maestría y templanza, dejando el listón muy alto para las que quisieran ocupar un lugar en el podio.

Uno de los grandes alicientes de la final femenina ha sido ver competir a Brooke Raboutou. La joven norteamericana llegaba a Innsbruck después de haber conseguido dos bronces consecutivos en la Copa del Mundo de boulder y era una incógnita qué podía hacer en dificultad. La audiencia ha acabado rendida a sus pies después de que haya caído a escasos movimientos del top.

Tan solo una escaladora podía superar a Raboutou, y esa ha sido, como no, Janja Garnbret. La eslovena suma 70 participaciones en competiciones internacionales y el 94% de éstas ha pasado a la finales. A sus 22 años ya cuenta con 18 medallas de oro, 9 de plata y 5 de bronce. La última de oro la ha conseguido en Innsbruck, donde ha superado todos los dinámicos de la vía de forma espectacular, ha pasado por la sección física prácticamente sin esfuerzo y se ha asegurado el único top de la final con un dinámico muy controlado. A menos de un mes para que empiecen los Juegos Olímpicos de Tokio, Janja es la principal favorita en todas las quinielas.

Clasificación general femenina

Jakob Schubert gana en casa

La final masculina no ha sido tan interesante como la femenina. Si las mujeres se han enfrentado a una vía con diversas secciones muy marcadas, los hombres lo han hecho ante una línea sin ningún crux real, donde todo se ha reducido a la resistencia.

El primero en competir ha sido Stefano Ghisolfi, que recientemente ha estado en Céüse (Francia) probando Bibliographie, la propuesta de 9c de Alex Megos. Esta circunstancia parece haberle beneficiado, encontrándose ante una vía donde lo único que ha tenido que hacer es leer bien las secuencias y gestionar bien su esfuerzo. El italiano ha caído a pocos movimientos del top y los espectadores han presupuesto que muchos más competidores llegarían fácilmente hasta bien arriba.

Nada más lejos de la realidad, Sascha Lehmann, Masahiro Higuchi, Alberto Ginés y Alex Megos han caído entre el movimiento 37 y 38, dejando la puerta del podio abierta a dos de los principales favoritos, Adam Ondra y Jakob Schubert. Por otra parte, Luka Potocar, un nombre a tener en cuenta, ha quedado fuera de juego antes de lo que esperaba.

Jakob Schubert jugaba en casa y se ha notado. El austriaco ha escalado tranquilo, a pesar de que sabía que tenía que hacer top o como mínimo llegar hasta bien arriba si quería estar en el podio. Schubert ha conseguido un plus más que Ghisolfi, volando cuando ha intentado un movimiento desesperado para dominar el top. Esta actuación le ha valido la victoria, bajando a Ghisolfi a la segunda posición. Sascha Lehmann ha acabado tercero.

La gran sorpresa la ha dado Adam Ondra, que ha dejado mudo al público al caer muy abajo en la vía de la final. Antes del error que lo ha llevado hasta la última plaza entre los finalistas Ondra ya había perdido un pie en un paso y había aguantado la puerta para no caer. Incompresiblemente, pocos movimientos después el checo ha vuelto a cometer un fallo y ahí se ha acabado su participación en Innsbruck.  Nadie daba crédito a lo sucedido e incluso Schubert ha comentado que le habría gustado ver a Adam resolver los últimos movimientos de la vía.

Clasificación general masculina