Alberto Ginés se ha proclamado a finales de mayo ganador de la Copa de Europa juvenil de bloque 2019 de la IFSC en categoría Youth A (16 y 17 años). El cacereño de 16 años ha competido en las tres pruebas de la copa y ha sido el escalador más regular, quedando cuarto en Soure (Portugal), ganando en Graz (Austria) y subiendo al segundo cajón del podio en Sofía (Bulgaria).
La última vez que hablamos con Alberto Ginés acababa de conseguir pasar a su primera final absoluta en una Copa del Mundo de escalada de dificultad, en Arco 2018. Además, el mismo año ganaba el Campeonato de Europa juvenil de dificultad, que ya había conseguido en 2017.
También en 2018, Alberto encadenó su primer 9a Víctimes del Futur, en Margalef. Ahora, metido de lleno en el circuito competitivo, parece que la roca ha quedado en un segundo plano para Ginés. Le preguntamos sobre ésta y otras cuestiones tras colgarse el oro en Europa.
—
«Caerte porque no puedes más y con los brazos a punto de estallar y la sensación de saber que solo tienes una oportunidad es algo que me tiene enamorado desde pequeño»
—
Soure, Graz y Sofía. ¿Cuál de las tres pruebas te ha gustado más esta temporada?
No lo tengo muy claro, pero creo que me quedo con Sofía. A parte del resultado, es en la competición de este año en la que más cómodo me he encontrado escalando, sobre todo en la clasificatoria.
¿Esperabas ganar la copa? ¿Era tu principal objetivo?
Sinceramente no. Aunque entreno el bloque y me gusta mucho, siempre he sido más de cuerda, y aunque quería hacer un buen papel en la copa de bloque no me esperaba ni mucho menos ganarla.
Ya habías ganado dos títulos como campeón juvenil en dificultad. ¿Prefieres esta disciplina?
Definitivamente sí, me quedo con la cuerda. Caerte porque no puedes más y con los brazos a punto de estallar y la sensación de saber que solo tienes una oportunidad es algo que me tiene enamorado desde pequeño, y más después de la final de Arco del año pasado.
¿Y la velocidad, te gusta? ¿Entrenas las tres disciplinas por igual?
La verdad es que la encuentro bastante divertida, sobre todo para picarse un poco con los amigos, pero por desgracia no la puedo entrenar todo lo que me gustaría. En España solo tenemos dos muros de velocidad reglamentarios, uno en Madrid y el otro en Pamplona, y entre los estudios y las competiciones no me queda tiempo para ir hasta allí a entrenar.
Debutaste en una absoluta de bloque en Múnich. ¿Cómo fue la experiencia?
Fue una experiencia increíble, aunque tengo que reconocer que iba con un poco de miedo, ¡jaja!
¿Hay mucha diferencia en la dificultad de los bloques entre la categoría juvenil y la absoluta?
Obviamente la dificultad es más alta, pero en lo que más se diferencia es en el estilo de equipamiento.
Estarás también en la última prueba del circuito internacional absoluto, en Vail. ¿Qué esperas de la cita?
No sé qué esperar. Con darlo todo y disfrutar estoy más que satisfecho. Es la Copa del Mundo, el nivel es altísimo.
Al finalizar las competiciones de boulder, ¿cuáles serán los siguientes objetivos del año?
A finales de junio empieza la temporada de cuerda. Haré las primeras pruebas de la Copa del Mundo absoluta y la juvenil de Europa. Luego llegan los Campeonatos del Mundo, tanto en Hachioji (Japón), que es clasificatorio para los Juego Olímpicos de Tokio 2020, como el juvenil en Arco (Italia).
¿Te queda algo de tiempo para escalar en roca? ¿Algún proyecto para este año?
La verdad es que no. Ahora estoy centrado al 100% en la competición y si al final del año me sobra algo de tiempo me gustaría meterme en algo duro y escalar un poco a vista, pero sobre todo disfrutar de la roca y los amigos.
Actualmente vives en el CAR de Sant Cugat. ¿Por qué te has trasladado allí para entrenar?
Me concedieron una beca del Consejo Superior de Deportes para el Centro de Alto Rendimiento de Sant Cugat, en Barcelona. Estoy muy contento por ser el primer escalador que ingresa en el CAR.
La solicité porqué era muy difícil poder entrenar en Extremadura. Además, mi entrenador, David Macià, está en Barcelona y así, la verdad, es todo mucho más fácil.
La experiencia está siendo muy positiva, me encuentro muy integrado en el CAR, además de todas las facilidades que me dan para poder desarrollar mi actividad deportiva. Es una pasada.