A su vuelta de Margalef, donde Adam Ondra ha estado probando Perfecto Mundo 9b+, el escalador checo ha avivado un debate que desde hace unos meses que está de plena actualidad en redes sociales, foros de escalada y discusiones entre escaladores: el uso de las rodilleras.

Edu Marín ya dio su opinión el pasado mes de febrero cuando cuestionaba el nivel de dificultad de una vía si se hacía con o sin rodillera y ha vuelto a pronunciarse en una nueva publicación.

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Edu Marín: «Si me pongo las rodilleras en una vía donde no se utilizaron en la primera ascensión es posible que encuentre pequeños reposos e incluso algún movimiento puede ser más asequible» 

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Alex Megos también se posicionó respecto al mismo tema a finales del mes de diciembre, tras encadenar The Story of Two Worlds 8C, en Cresciano (Suiza). El alemán dejaba bien claro que en este problema, el uso o no de una rodillera podía hacer que cambiara el grado de forma significativa.

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Alex Megos: «Parece que la comunidad escaladora no hace distinciones y pocas veces se explica cómo se ha realizado la línea. En la escalada, y especialmente en el boulder, todo se reduce al cómo»

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Otro que se pronunció en referencia al uso de las rodilleras y cómo éstas están influenciando en la evolución de la escalada deportiva y el boulder fue José Luis Palao «Primo». El escalador de Elda lo hizo después de tachar el verano pasado varias vías en la Cueva de Alí Babá, en Rodellar, y decía: «No estamos escalando las mismas vías o bloques que Dani Andrada estableció hace 15 años en la cueva. Aparecen nuevas presas, nuevos métodos, nuevos recursos con las rodilleras. Esto se traduce en un estilo de escalada más asequible. Para mí esto es más importante que un número o una letra. Se trata de seguir con la filosofía que aprendí en mis inicios y que creo que se está perdiendo. No siempre más es más. Hay que aceptar que esto no es lo que era, con sus pros y sus contras. Realmente da que pensar…».

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José Luis Palao «Primo»: Aparecen nuevas presas, nuevos métodos, nuevos recursos con las rodilleras. Esto se traduce en un estilo de escalada más asequible»

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La opinión de Adam Ondra

Adam Ondra ha publicado un completo artículo de opinión sobre el uso de las rodilleras en la escalada en su página web. Además, las principales reflexiones las ha lanzado en una publicación en su perfil de Instagram, donde comenta como introducción: «A pesar de que cada día se acepta más ampliamente su uso, la rodillera sigue siendo una pieza controvertida entre el material de escalada. Esperaba con impaciencia el momento de poder expresar mi opinión y por ese motivo he decidido escribir un extenso artículo».

El resumen del checo es el siguiente: «Las rodilleras pueden convertir algunas vías en más fáciles. Esto puede parecer una falta de ética, especialmente en las más clásicas, donde la primera ascensión se hizo sin ellas. Por otra parte, algunos empotramientos de rodilla son marginales y realmente no cambian el grado, sino que simplemente cambia el estilo y la naturaleza de la escalada. De hecho, algunas vías podrían incluso empeorar, ya que podrían ser menos consistentes».

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Adam Ondra: «Creo que es importante que en la actualidad los escaladores profesionales digan cómo han encadenado la vía»

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Y Ondra finaliza el artículo diciendo: «Creo que es importante que en la actualidad los escaladores profesionales digan cómo han encadenado la vía. En disciplinas como la escalada en pared o alpinismo obviamente se dan detalles, pero también debería ser así para la escalada deportiva y el boulder. Si tienes un vídeo es suficiente, poco más habrá que explicar, por ejemplo. La decisión de utilizar o no una rodillera es algo personal, así como utilizar el método original o no, etc. Por otra parte, creo que los profesionales deberían reflejar todo esta información (uso o no de rodilleras, métodos, etc) en la graduación y no solo limitarse a repetir una vía y apuntarse el grado que marca la guía».

Lee el artículo de opinión completo publicado por Adam Ondra

La historia del uso de las rodilleras en la escalada

Jailhouse Rock, en California, y Cave Rock, en Nevada, son los lugares donde se desarrolló la técnica moderna de los empotramientos de rodilla, y por lo tanto, donde se vieron las primeras rodilleras. Así lo recoge el libro The Climbing Dictionary (The Mountaineers Books), escrito por Matt Samet: “Tom Herbert recuerda haber utilizado una rodillera en Jailhouse en 1989, siendo el primero en pegar una pieza de goma Stealth a la rodillera, usando las técnicas de Tony Puppo para pegar las suelas en los recauchutados”.

Han pasado 31 años desde esta efeméride y el uso de las rodilleras en la escalada se ha extendido mundialmente. Nos hemos acostumbrado a ver a los escaladores y escaladoras más fuertes llevando este accesorio y pocos son los que no lo incluyen entre su material imprescindible para escalar.

El kneebar (empotramiento de rodilla en inglés) es una de las técnicas más útiles de la escalada y se produce cuando se coloca la rodilla y el pie entre dos superficies de roca. El empotramiento de rodilla sirve para reposar o para solucionar pasos duros de una forma más eficiente.