Solveig Korherr ha encadenado Esclatamasters, en Perles. La escaladora alemana ha necesitado únicamente ocho intentos, repartidos en cinco días, para anotarse una de las vías de escalada deportiva más populares de la Península.

Esclatamasters, equipada por Salva Serrano, no ha perdido su magia en los casi 20 años que han pasado desde que Ramon Julián firmara la primera ascensión, en un ahora lejano 2006. Korherr ha reconocido que «es una de las mejores vías que he escalado en caliza. Combina dos estilos completamente diferentes sobre una roca de calidad excelente, pasando de una exigente escalada sobre chorreras a una sección de pequeñas regletas que requiere fuerza y resistencia. Es única».

Tras la primera ascensión, Julián propuso 9a para Esclatamasters, aunque Seb Bouin y Magnus Midtbø la repitieron con posterioridad y prefirieron en 8c+. La rotura de una presa en la sección de la placa acabó consolidando el grado en el 9a. La vía ha recibido un buen número de repeticiones recientemente y todos y todas las que la han escalado se la han anotado como un noveno, sin embargo, Solveig ha discrepado en este sentido: «La he sentido como un 8c+ más que como 9a, si la comparo con otras vías que he hecho y la dificultad de los movimientos, pero solo es mi opinión. Debo estar en el mejor momento de forma de mi vida. Creo que me he adaptado muy bien a la roca durante las últimas semanas y mi motivación es infinita ahora».

Tal y como comenta Korherr, es realmente excepcional el momento de forma en el que se encuentra. No hace muchos días, cerca de Perles, en el muro del Contrafort del Rumbau, como preludio a su rotpunkt en Esclatamasters, se anotó Humildes Pa Casa 8b+ a vista. En el mismo lugar también ha encadenado entre finales de 2023 y lo que llevamos de 2024 líneas como Marroncita 8b, Fish Eye 8c, De Picos Pardos 8b o Mind Control 8c.

De momento, Esclatamasters se coloca entre las vías más duras en la libreta de Solveig Korherr, que ya atesoraba joyas como La Cabane Au Canada 9a, en Rawyl (Suiza), o Jungfraumarathon 9a, en el muro de Gimmelwald, también en Suiza.