Lukas Sager encadenó Yeah Man (330m 8b+), en el macizo de los Gastlosen, en los Alpes Suizos, a finales del mes de agosto. El joven escalador de 16 años tenía una escasa experiencia previa en vías de varios largos pero decidió escoger esta vía para descubrir qué significa escalar grandes dificultades en pared.
«Mi padre y mi madre son escaladores. Empecé a escalar con ellos de forma natural, así que después de haber hecho algunas vías en pared con ellos me apetecía probar algo duro en este estilo. Vi a Cédric Lachat cuando probaba varias vías de gran dificultad durante su proyecto Swissway to Heaven e inmediatamente me enamoré de Yeah Man. Ya había estado en los sectores de deportiva bajos las grandes paredes de los Gastlosen y necesitaba experimentar qué se sentía al escalar esa caliza agresiva más allá de las vías deportivas», explica el austriaco.
Abierta en 1999 por François Studenmann y Guy Scherrer, Giovanni Quirici escaló Yeah Man por primera vez en libre en 2010. Años antes, en 2004, Josune Bereziartu y Rikar Otegi escalaron también la vía en este estilo, aunque lo hicieron en varias jornadas. Concretamente en 14. Haciendo cordada con su padre, Lukas invirtió cinco días de trabajo en la vía y la pudo encadenar en libre durante la sexta jornada.
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«Lukas Sager: En el intento clave decidí ir a muerte y saltarme dos cintas, iba muy motivado pero también con los brazos al límite»
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«Pude encadenarla en mi último intento. La meteorología se estaba poniendo fea así que no podía fallar. En los cinco primeros largos escalé de forma muy fluida. En la sexta tirada, de 8a, necesité dos intentos. El largo más duro es el octavo, un 8b+ en el que necesité también dos peques para encadenar. En el intento clave decidí ir a muerte y saltarme dos cintas, iba muy motivado pero también con los brazos al límite. Dor Roda, que estaba colgado en la pared grabando y haciendo fotos, se puso casi más nervioso que yo en esta sección clave», comenta.
Sager no tiene ningún otro objetivo en mente a corto plazo en grandes paredes pero confiesa que se ha estudiado bien la guía del Rätikon y «sé que en España hay alguna vía de largos que llega hasta el 8c».
A principios de este año Lukas pasó cuatro meses escalando principalmente en Margalef, donde pudo encadenar vías como L’espiadimonis 8c o Mistic 8c y también dejó algún proyecto pendiente en el Racó de la Finestra.