Ana Belén Argudo ha vuelto a protagonizar dos encadenamientos destacados en Cuenca durante los últimos días. La escaladora madrileña ha tachado con pocos días de diferencia Citania 8c y Corazón de Cofrade 8c.

«Como parece que el destino no quiere que vayamos a Catalunya, volvemos a Cuenca para cerrar este proyecto y empezar otros para seguir con el círculo vicioso», ha comentado Ana haciendo referencia al rotpunkt de Citania. Tenía previsto viajar en breve a Catalunya para escalar en lugares como Margalef pero ha retrasado su planes, aunque no ha perdido el tiempo.

Respecto a Corazón de Cofrade, es una de las últimas incorporaciones a la larga lista de vías duras en Cuenca. La vía se encontraba a medio equipar y fue Dani Andrada quien la acabó recientemente.

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«Corazón de Cofrade tiene una variante que sale por la Malleus Maleficarum y que es 9a. Ya veremos si eso tiene futuro, de momento la he probado»

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«A finales de 2021 sufrí una lesión de hombro, así que tuve que parar de escalar prácticamente un mes. Empecé 2022 escalando de forma progresiva y pude encadenar algún 8b y 8b+ en Cuenca. Entonces empecé a probar Citania. Era un poco difícil porque la vía tiene mucha humedad. Los cantos están un poco mojados siempre. Había días en los que era casi imposible intentarla. La intención después de hacer esta vía era viajar ya a Catalunya pero de momento estamos sin furgoneta y no podemos movernos. De hecho, el día que encadené Citania fui a Cuenca en autobús, saliendo de Madrid a las 5:30h de la mañana. El mismo día que la hice ya me metí en Corazón de Cofrade. El pasado domingo volví con Simón Padín. Le di un pegue para recordar los movimientos y me sentí muy bien. Además, la condición eran excelente. En el segundo intento me caí en un lance y al tercer intento del día la pude encadenar. La misma vía tiene una variante que sale por la Malleus Maleficarum y que es 9a. Ya veremos si eso tiene futuro, de momento la he probado. Si en algún momento recuperamos la furgoneta iremos para Catalunya», explica Ana Belén Argudo.

Ana Belén Argudo y Cuenca

Con estos dos encadenamientos Argudo seis vías entre el 8c y el 8c+ en Cuenca, la escuela que se ha convertido en su terreno de juego preferente desde hace un año. En abril de 2021 sumó ahí su primer 8c con Sumazero, una ascensión que le dio alas y la motivación suficiente para enfocarse en otros proyectos más duros.

Dos meses después de Sumazero Ana realizó un paso más al encadenar Madiba 8c/+, una vía equipada por Darek Kaluza e Iris Matamoros que se encuentra en el sector Rincón de la Ermita. El siguiente paso natural era apostar por el 8c+, que llegó para la madrileña en octubre de 2021 al tachar Potemkin 8c+. Con esta ascensión se convirtió en una de las pocas escaladoras españolas que han conseguido alcanzar el 8c+ y ahora el 9a está entre sus planes a corto o medio plazo.