Felipe Camargo establece ‘Avenida Brasil’ (280m 8c), una de las vías en pared más difíciles de Sudamérica
El brasileño invierte prácticamente un mes entre el equipamiento y la ascensión para crear 'Avenida Brasil', una línea dura y exigente en una de las cuevas más espectaculares del mundo
Felipe Camargo ha conseguido la primera ascensión de Avenida Brasil (280m 8c), en la Gruta Casa de Pedra, localizada en el Parque Estadual Turístico do Alto Ribeira (Brasil). Según ha comentado Camargo al anunciar su encadenamiento, «es una de las vías en pared más difíciles de Sudamérica».
La Gruta Casa de Pedra tiene una altura de 215 metros y el portal de entrada a la cueva se considera el más grande del mundo. «Esa cueva es muy conocida en Brasil. Siempre había oído hablar del lugar pero nunca había estado ahí. Realmente no sabía si la roca tendría suficiente calidad para poder escalar, pero después de hacer Corazón de Ensueño, en 2016, empecé a pensar en ese proyecto. Dentro del Parque no se podía escalar y desde 2018 empecé a hablar con la dirección de éste para conseguir el permiso. Afortunadamente la respuesta acabó siendo positiva y pude equipar tanto Avenida Brasil como otras vías. A raíz de esta ascensión se va a regular y permitir la escalada en el lugar», explica el brasileño.
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«Es difícil graduar este tipo de vías porque acumulas el cansancio largo tras largo»
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Avenida Brasil recorre a lo largo de 280 metros una estética línea a la derecha del arco de la cueva. Las dificultades máximas se concentran entre el tercer y sexto largo, de los ocho en total. Dice Felipe que «en el tercer largo empiezan lo duro. Primero una tirada de 8b con un bloque al inicio muy a dedos alrededor del 7C; después sigue un largo de 8b+, de los mejores de la vía. Escalas por un diedro siempre en lateral, por una fisura roma; otro de 8b, de 40 metros, de presas grandes; y el sexto es el más difícil, en la salida del techo, un 8c también con una sección a bloque alrededor del 7C+/8A. Es difícil graduar este tipo de vías porque acumulas el cansancio largo tras largo, pero he intentado hacerlo pensando como si fueran largos que escalara de forma independiente desde el suelo. En general me parece más dura de Corazón de Ensueño, donde no tuve que trabajar tanto la vía y cuando la encadené no me caí en ningún largo».
Tal y como relata Felipe Camargo, compara Avenida Brasil con Corazón de Ensueño (210m 8c), localizada en el Arco de Getu, en China, con primera ascensión de Dani Andrada -la equipó él mismo-. Felipe la encadenó en 2017, formando cordada con Alex Honnold, y fue su inspiración para establecer su propia king line en su país, Brasil.
Avenida Brasil, la joya escondida
A pesar que la Gruta Casa de Pedra es un monumento natural popular en Brasil, el acceso hasta la cueva no es rápido y antes de poder empezar a trabajar la vía Felipe Camargo y los compañeros que le ayudaron tuvieron que trabajar duro.
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«Tuvimos que trabajar muchísimo para equipar la vía. La cueva no se moja nunca cuando llueve y eso nos obligó a limpiar mucho»
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«Tuvimos que trabajar muchísimo para equipar la vía. La cueva no se moja nunca cuando llueve y eso nos obligó a limpiar mucho. También fue difícil encontrar la línea y tiramos muchos bloques sueltos. En los ocho largos te encuentras con diferentes tipos de roca, algo que no sucede habitualmente. En el primer viaje estuvimos 17 días entre limpiar, equipar, etc. Incluso cuando ya creíamos que estaba lista tuvimos que cambiar algunos seguros de sitio y modificar el recorrido de algunos largos. En el segundo viaje hemos estado 10 días. Para llegar hasta la cueva hay que caminar 5 kilómetros de ida y 5 de vuelta y solo pudimos dormir allí cuando ya empecé a trabajar la vía para liberarla», comenta Camargo.
Después de tres o cuatro días probando la vía una vez equipada y limpia Felipe Camargo realizó el intento definitivo, consiguiendo el rotpunkt de Avenida Brasil. «Tanto para equipar la vía como para sacar todos los métodos invité a Alex Mendes, un joven y fuerte escalador brasileño de 22 años. El día del encadenamiento, formando cordada con Mendes, empecé a escalar a las 9 de la noche debido a las condiciones. Esa jornada escalé hasta pasada la madrugada. Dormimos en la pared y al día siguiente esperamos que llegara la sombra a la pared. Acabé la vía a las seis de la tarde de la segunda jornada».