Bronwyn Hodgins ha repetido Necronomicon 5.13d/14a (8b/+), el gran techo fisurado localizado en la zona de White Rim Trail, dentro de los límites del Parque Nacional de Canyonlands (Utah, USA). Descubierta por Rob Pizem, esta línea que se escala en estilo tradicional recibió la primera ascensión de la mano de Jean-Pierre Ouellet, en 2011.

La primera y segunda repetición de la vía se las llevaron Pete Whittaker y Tom Randall, respectivamente, en abril de 2019, cuando realizaron un road trip con esta mítica vía como principal objetivo. La de Hodges ha sido la segunda ascensión femenina, después de la que firmó Mary Eden en octubre.

Necronomicon es una impresionante fisura que parte en dos un techo completamente horizontal. La vía requiere una depurada técnica de empotramientos de manos, puños y rodillas. La escaladora canadiense ha explicado en su perfil en Instagram que su secuencia en la línea ha «requerido múltiples giros de 360º y un doble empotramiento de rodillas sin manos. También encontré un bat hang sin manos empotrando los tobillos pero estaba muy nerviosa para utilizar este movimiento durante el pegue del encadenamiento». En total ha invertido cinco días de trabajo en la vía, encadenándola «al segundo intento completo de la vía».

Respecto a la dificultad de Necronomicon, Bronwyn ha opina que «el grado depende probablemente del tamaño de las manos que tengas y para mí estaría en el límite del 8b/+». Este encadenamiento es el más duro en estilo tradicional hasta la fecha para Bronwyn Hodgins. En 2018 escaló en libre Freerider y en 2021 Golden Gate, dos vías emblemáticas de El Capitán, en Yosemite.

El pasado verano la canadiense pasó 65 días en un viaje de escalada a lo largo de la costa noroeste de Groenlandia junto a Jacob Cook, Jaron Pham, Kelsey Watts, Zack Goldberg-Poch y Angela Vanwiemeersch. El equipo estableció allí vías como Sea Barge Circus (900m 5.11+), en Qaersorsuaq, y Time is a Construct (400m 5.11 A2), en Red Wall.