Tomás Ravanal es un escalador discreto y humilde, de los que pasan desapercibidos cuando entrenan en el rocódromo o llegan a pie de vía. Sus encadenamientos hablan por él. A principios de año culminó uno de sus sueños como escalador profesional: encadenar La Rambla 9a+, en Siurana.

El chileno visitó España por primera vez en 2008, en un viaje de escalada que le llevó por escuelas de Catalunya y Aragón. Desde entonces ha viajado a la Península frecuentemente, hasta que en julio de 2017 llegó para quedarse.

Después de encadenar La Rambla, la motivación y el estado de forma de Tomás estaban al máximo. En ese pico de rendimiento también consiguió una primera ascensión en El Pati, con Sin Ácido Clorhídrico 8c+, que unos días más tarde también tachó Dani Andrada.

El escalador chileno cambió de escuela y se motivó con Era Vella 9a, en Margalef. Probando la king line de Chris Sharma, en un bidedo en extensión, se lesion un dedo. Fue en abril.

Ravanal tuvo que parar de escalar por completo, algo muy duro y difícil de gestionar para un escalador profesional. En la entrevista que publicamos en exclusiva, Tomás Ravanal se sincera y nos explica, además de su trayectoria como escalador, cómo está viviendo el proceso de recuperación.