Han pasado más de 10 años desde que Adam Ondra propuso el primer 9b+ del mundo con Change, en la Cueva de Hanshelleren, en Flatanger (Noruega). Desde entonces el checo no ha bajado su rendimiento prácticamente en ningún momento.

En febrero de 2013, cuatro meses después de encadenar Change, Ondra conseguía la primera ascensión de La Dura Dura, en Oliana. Chris Sharma la repitió una semanas más tarde y confirmaba el grado. Se convertía en el segundo 9b+ en la historia de la escalada deportiva. Adam supo aprovechar la espiral de motivación en la que había entrado y ese mismo año, en diciembre, establecía Vasil Vasil, su tercer 9b+, en Moravský kras (República Checa). Ésta aún no cuenta con ninguna repetición.

A pesar de no volver al 9b+ hasta que realizó la primera ascensión de Zvěřinec en noviembre de 2022, las vías entre el 9a y el 9b/+ no han dejado de sucederse en la trayectoria del escalador de Brno. Con Zvěřinec (Menagerie) cerraba un proyecto con el que había soñado durante mucho tiempo y que añade un inicio más duro a Perlorodka 9a+/b.

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«Estoy seguro de que es el segundo encadenamiento más duro de mi vida. Silence y Menagerie»

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En el último vídeo que ha publicado Adam Ondra en su canal de YouTube relata todo el proceso que vivió trabajando Zvěřinec y sobre el día que finalmente consiguió el rotpunkt explica: «En casi todas las vías duras que he encadenado en mi vida he tenido que escalar de forma muy precisa, a la perfección. Con Menagerie sentí que tenía un pequeño margen de error y acabé de encontrar el ritmo. Simplemente escalé, sin pensar en nada más, pero en la parte de arriba, donde la vía ya llega al 9a+, sabía que existía un pequeño margen para el error porque la sección la tenía muy asimilada. Hice más fuerza en las presas de la que debería. Todo esto son cosas que a veces no puedes controlar. Me sentía en un estado de forma ideal para encadenar la vía a pesar de no controlarlo todo. La última sección será un 7A de boulder más o menos y podía haber caído ahí. Escalé en mi límite. Estoy seguro de que es el segundo encadenamiento más duro de mi vida. Silence y Menagerie. Es un 9b+ pero creo que es bastante más difícil que La Dura Dura, Vasil Vasil o Change. He vuelto a encadenar un 9b+ nueve años después».