Pau Galofré ha entrado en la novena dimensión con Pornographie 9a, en Céüse (Francia). El escalador catalán llevaba un tiempo tras este objetivo y su campaña de verano en uno de los mejores muros de la escalada deportiva en el mundo le ha abierto la puerta a un grado en el que seguramente empezará a sentirse cómodo a partir de ahora.
«Tenía ganas de llegar al 9a. Desde la pasada temporada en Margalef me vi con opciones y nivel de empezar a probar algunos novenos, aunque todas las vías que había probado hasta ahora en serio estaban por debajo de ese grado. Pero por curiosidad y con la mirada puesta en el próximo otoño e invierno ya me metí en Víctimes del Futur 9a y más a largo plazo pienso en First Ley 9a+ y El Bon Combat 9b», explica Galofré.
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«Me sentí bien para hacerla rápido ya que en mi segundo pegue pude enlazar todas las secciones de cinta a cinta. El cuarto o quinto día caí en el último paso y entonces fui consciente de que podía encadenarla antes de volver a casa»
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El catalán llegó a Céüse hace unas semanas con las ideas claras y con la intención de probar algo difícil: «Una amiga, Angie Scarth-Johnson, me recomendó Pornographie, que también estaba probando. Me sentí bien para hacerla rápido ya que en mi segundo pegue pude enlazar todas las secciones de cinta a cinta. El cuarto o quinto día caí en el último paso y entonces fui consciente de que podía encadenarla antes de volver a casa. El proyecto se fue alargando más de lo que imaginaba y cuando llegaron unos amigos, Roger Crespo y Esteban Lahoz, decidimos visitar otras zonas. El cambió me fue muy bien. Pude recuperar algunas heridas que tenía en la piel y salí del bucle que supone probar solo una vía. Al volver a Céüse la pude encadenar».
La primavera pasada Pau empezó a dar señales de que tenía el 9a cerca. Tan solo era cuestión de tiempo y de poder encontrar la vía que se adaptara bien a sus cualidades. En Margalef tachó Perfecto Passat 8c+/9a hasta la primera cadena y poco antes también se había anotado Bumbayé 8c+. Durante las vacaciones en Céüse solo ha escalado en roca y no ha entrenado, aunque reconoce que el entrenamiento planificado ha sido crucial en su evolución: «Entreno con Pedro Bergua desde hace casi dos años y he notado muchos progresos. Cuando vuelva de Céüse retomaré mis entrenamientos. También he empezado a trabajar con Luis Rozmar, que me lleva la parte nutricional. Hace poco que decidí empezar a cuidar mi alimentación, es algo también importante para rendir mejor».
Con el otoño a la vuelta de la esquina Pau Galofré empezará a combinar de nuevo las competiciones con la roca. Este año ya ha participado en la primera prueba de la Copa de España de Dificultad y en el Campeonato de Catalunya de Boulder subió al tercer cajón del podio. «En roca aún no tengo claro si me decantaré por trabajar pocas vías en mi grado máximo o escalar líneas que me puedan salir rápido. Seguro que alguna dura probaré. También estoy motivado para hacer algo de bloque, una disciplina que tengo un poco olvidada. Me moveré entre Margalef, Siurana, Santa Linya, Sadernes, Targassone y Albarracín», concluye Pau, de 22 años.