Pete Whittaker y Tom Randall, los Wide Boyz, están realizando un road trip a lo largo del Parque Nacional de Canyonlands, localizado en el estado de Utah, en Estados Unidos. Uno de sus principales objetivos en este viaje al yanqui era Necronomicon, una monstruosa fisura en techo de 5.13d/14a (8b/+), en la zona de White Rim Trail, que ya han conseguido encadenar.
Las ascensiones de Whittaker y Randall han sido la primera y segunda repetición, respectivamente. Ocho años atrás, en 2011, Jean-Pierre Ouellet le puso el primer punto rojo. La línea fue descubierta por Rob Pizem, que no consiguió encadenarla en su momento. Ouellet invirtió 12 intentos, repartidos en dos semanas, antes de llevarse la vía colocando el material de primero.
Pette Whittaker ha comentado en su perfil de Instagram que la mayor dificultad ante la que se ha encontrado para encadenar Necronomicon ha sido un crux donde tener las manos estrechas ayuda, «yo tengo unas manos notoriamente gordas».
Después de esta ascensión, los Wide Boyz ya trabajan en un nuevo proyecto. Se trata de una vía de 50 metros que finaliza con un offwidth. Esta última parte ya la habían encadenado en un viaje anterior y ahora le han sumado 40 metros más, resultando una escalada de empotramientos de manos, puños, dedos, manos estrechas y demás. Esta vía podría alcanzar una dificultad de hasta 5.14c (8c+). Estaremos atentos.