El futuro de la escalada en la Cova Gran de Santa Linya, en Lleida, se encuentra en peligro. Desde hace años conviven en esta famosa zona de escalada la excavaciones arqueológicas y la escalada deportiva. Arqueólogos y escaladores llegaron a un acuerdo en su día para que las dos actividades pudieran convivir. Los escaladores ocupan principalmente las estaciones de otoño, invierno y primavera, y los arqueólogos trabajan durante el verano.
Ahora, este acuerdo podría dejar de tener vigencia ante el descubrimiento de nuevas manifestaciones artísticas, las más antiguas de Catalunya, fechadas en el Paleolítico Superior, según los arqueólogos. Así lo explica un artículo publicado en el periódico La Vanguardia.
Ante esta situación, parece que habrá que volver a negociar el uso compartido de la cueva de Santa Linya. De momento, se ha abierto una petición en Change.org para salvar la escalada deportiva en Santa Linya y poder seguir disfrutando de esta gran zona de interés mundial.
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