La fotografía de escalada ha evolucionado mucho desde que empezase la propia
escalada hasta ahora. Hace apenas 15 años esta especialidad de la fotografía era casi
exclusiva de escaladores fanáticos, que combinaban ambas modalidades. Eso
cambió con el paso del carrete a los píxeles de los sensores actuales.
Actualmente la escalada indoor y en roca han multiplicado sus practicantes, algo que ha repercutido directamente sobre esta especialidad fotográfica, que no ha sido menos. Probablemente, el acceso a equipos fotográficos más asequibles y fáciles de usar, que a la vez pueden dar muy buen rendimiento, el fácil acceso a formación en internet y el querer mostrarlo todo en redes sociales han sido el detonante definitivo.
Todos tenemos algo que contar. De hecho, a día de hoy (y siempre ha sido así) se dice que la foto «debe contar una historia». Está claro que si cada fotografía cuenta una historia, ésta puede llegar a hacernos sentir a nosotros mismos como los escaladores protagonistas, sentir que estamos allí, desear poder visitar ese lugar o llegar a realizar un hito similar.
Si la voluntad de querer contar una historia se combina correctamente con unos
conocimientos técnicos, seguramente acabaremos obteniendo fotografías que atraigan la atención de cualquiera que las mire. Si uno de los dos falla, probablemente obtengamos más fotografías del montón.
Soy Carlos Pérez, cabo del SPEIS Bombers de Barcelona. Estudié fotografía en el IEFC Institut d’Estudis Fotogràfics de Catalunya y cuento a mis espaldas con varios años de fotógrafo profesional colaborando con marcas y publicaciones como Vèrtex, Desnivel, Escalar, Escalando, Rock and Ice, Grimper Magazine, Climbing Magazine, OS2O, CCT21, Sala d’Escalada Batec, Tenaya, Climbskin, Fixe, Sterling Ropes, Madrock, Top30, Entreprises o 5.10.
Actualmente colaboro de forma estable con el equipo de escalada de competición CCT21, la marca de ropa OS2O y con la Sala de Escalada BATEC. Además, tengo en marcha varios proyectos de los que saldrán cosas buenas.
Temas y protagonistas
La fotografía de escalada engloba muchos de los temas principales de la fotografía
general:
- Fotografía deportiva pura y dura: competiciones, fotos cerradas de encadenamientos, etc.
- Fotografía de paisaje, por ejemplo, para describir una zona en un reportaje.
- Fotografía de retrato: escaladores en un momento importante o incluso en estudio.
- Fotos de lifestyle: ambiente en pies de vía, campo base, fotos de la zona
que se visita, etc. - Fotos de bodegón: material a pie de vía, en estudio, etc.
En cuanto a los protagonistas, de una forma o de otra, y a grandes rasgos, para mí se puede resumir dos principales. Por la gran expresividad y gestos de quien escala en
momentos concretos de una vía, ya sea por apretar, pasar miedo, fijar miradas en cantos
a los que debe ir forzando posturas a su límite, estar en un lugar espectacular, uno de los
elementos es la propia escaladora o escalador.
El segundo es obvio. Es el entorno. El entorno puede ser una inmensidad al estilo Yosemite o puede ser un pequeño bloque de Albarracín. Pero también puede ser un pie de vía e incluso un pequeño rocódromo en una habitación.
Quizás hay un tercer componente que enlaza estos dos primeros, que sería la acción, y que se resumiría en qué es lo que hace el escalador por sí mismo, o en relación a ese entorno.
Más allá de una historia que explicar
De todas formas, aparte de la voluntad de contar una historia, es necesaria también una planificación más técnica o de proceso para llegar a obtener esa fotografía. La idea, el equipo humano necesario, el lugar, el cuándo, la técnica, el material fotográfico, la edición, el uso al que estará destinado, … Toda esta parte va a ser prácticamente el cuerpo de esa fotografía en la que querremos «contar esa historia».
Dividido en tres capítulos, además de esta introducción, explicaré la parte más técnica de todo el proceso que sigo yo para hacer una foto o un reportaje entero, desde que surge la idea hasta que se entregan las fotos para un cliente o las utilicemos nosotros mismos para lo que hayamos decidido.
En la primera entrega expondré algunos conceptos básicos de fotografía general, particularidades de la fotografía en exteriores, fotografía en interiores y un poco la planificación con las personas, lugar y tiempo.
Una segunda entrega irá destinada al equipo fotográfico que suelo usar y lo que espero
de cada pieza que llevo. En general serán los tipos de cámaras que utilizo, objetivos para
interiores y exteriores, algo de flashes y trípodes por si hay que hacer fotos con poca luz o incluso selfies a distancia.
La tercera entrega irá destinada a la importancia de la seguridad a la hora de trabajar desde cuerdas y en un entornopeligroso como es la montaña. Por último, explicaré temas de edición sencilla que suelo hacer mediante ajustes generales, así como algunos formatos de entrega de las fotografías dependiendo del uso que vayamos a darles.
Espero que os guste. Cualquier duda me la podéis plantear a través de mi cuenta de Instagram @carlosperezfotografia por mensaje privado y os atenderé encantado.
Las fotografías de esta entrega
Mar Álvarez (y David asegurando) en Kif Kif Demain, en Bielsa
Una de las satisfacciones más grandes que tengo como fotógrafo es la de conocer a gente nueva y compartir con ellos nuestra pasión. Para mí es la única manera de obtener un buen resultado. Con David y con Mar sin duda ha habido muy grandes momentos.
En esta foto hecha con una cámara full frame estrenaba un objetivo ultra-angular. Este
objetivo abre la distancia focal hasta los 11mm, lo que hace que tengas que vigilar el no
salir hasta tú en la foto, y tener en cuenta todo el encuadre que va a salir y no solo la
protagonista. En este encuadre, debido a las líneas tremendas que dibuja la pared decidí
saltarme reglas y otras historias y centré a Mar por completo. Cámara full frame, objetivo
11-24mm a 11mm, f5, 1/500seg, ISO 200, prioridad apertura.
Ramonet en la sesión de fotos que hicimos en Mejorando Imagen, en Margalef
Ramón es sin duda el atleta que más me ha impresionado en mi vida. Es capaz de «reencadenar» un 9a+ después de su sesión de entrenamiento mientras hacemos las fotos del primer encadenamiento, y en pleno verano… Escalador de élite entre los élites, fue una de mis motivaciones como escalador y uno de mis lujos más grandes como fotógrafo. El retrato también puede formar parte de la fotografía de escalada. Cámara full frame, 46mm, f/5.6, 1/60seg, prioridad a la apertura.
Andrea Cartas (y Carlos asegurando), en White Zombie, en la Cueva de Baltzola
Esta serie de fotos fue importante para mí. Andrea me comentó si podía subir con ellos a
Baltzola a hacer unas fotos, a lo que accedí encantado. Allí pude disfrutar de ver a una
escaladora tremenda y de poder experimentar encuadres nuevos, con luz natural y con
flashes. Como guinda acabó siendo portada en una de las revistas nacionales
dedicadas al mundo de la montaña y la escalada. Foto tomada con cámara full frame,
16mm, f/5, 1/320seg y con prioridad a la apertura.
Óscar González y Arnau Marés en Intifada, en la Roca Alta de Vilanova de Meià
La gran mayoría de veces obtener la foto que buscas es fruto de una buena planificación
y del trabajo en equipo. Vilanova de Meià es una zona que conocemos bien y sabíamos
lo que queríamos conseguir. Estuvimos todo el día probando posiciones para poder estar
en el lugar que queríamos y cuando queríamos y así mostrar lo que significa escalar con la puesta del sol en un lugar como la Roca Alta. Cámara full frame, 11mm, f/4.5,
1/640seg, prioridad a la apertura.
Jordi Balasch y Luís Manzaneda en la vía CADE, en la Paret de Diables de Montserrat
Este ha sido hasta ahora mi gran proyecto. Sigue inacabado y ya tengo vías en mente para poder seguirlo. Contar con amigos para las grandes propuestas lo pone todo
mucho más fácil. Para este tipo de trabajo de muchos días y mucho esfuerzo se requiere
mucha planificación y voluntad del personal. Combinando las ganas con el saber hacer
del equipo, el resultado raramente defrauda. Cámara full frame, 16mm, f/5, 1/400 seg,
prioridad a la apertura.
Jorge Díaz Rullo en la Batec Boulder Party 2020, celebrada en la Sala Batec el pasado mes de febrero
La fotografía de competición es muy intensa. En poco tiempo debes conseguir las fotos que muestren de qué ha ido la competición y poder llegar a mostrar no solo a un escalador haciendo algo duro sino relacionarlo con el resto de factores. En este caso la sala estaba repleta de gente e iluminada con dos focos que me facilitaron el
trabajo de dar la imagen espectacular que tuvo el evento. En la próxima entrega explicaré
qué equipo utilizo para estos eventos. Cámara full frame, 24mm, f/1.4, 1/400seg.
Mar Álvarez (y David asegurando) en Era Vella, en Margalef
Conocer el lugar donde vas a hacer las fotos es muy importante. En este caso antes de empezar la sesión pude intuir que más arriba podría tener una buena foto de perfil de paisaje mientras Mar escalaba… ¡y con un teleobjetivo! Cámara full frame, 210mm, f/6.3, 1/400seg.
Sasha DiGiulian en la Cova Gran de Santa Linya
Hace ya unos años me dediqué a hacer fotos a escaladoras y escaladores de mucho nivel. Fue todo un lujo y un aprendizaje tremendo. En la mayoría de casos son ellas y ellos los protagonistas de cada fotografía, y casi se trataba de ir, colgarme, buscar un encuadre decente y ellos se encargaban de dar el espectáculo. Es una buena manera de hacer buenas fotografías sin duda. Cámara full frame, 135mm, f/2.5, 1/400seg, prioridad a la apertura.