Rannveig Aamodt sufrió un grave accidente de escalada en Turquía, en 2012. Una caída desde 15 metros de altura que cambió su vida radicalmente. Aquel 26 de abril, los equipos de emergencia evacuaron a Rannveig en helicóptero con fracturas en la espalda, la pelvis, ambos tobillos y otras innumerables lesiones. Lesiones físicas y emocionales. Según los médicos, nunca volvería a caminar correctamente y tampoco contemplaban que volviera a escalar.
Con muchísima determinación comenzó una larga recuperación. Dice Aamodt que tuvo mucho tiempo para pensar y ver qué era para ella escalar. Sabía que si no hacía todo lo que podía, no podría vivir con ese remordimiento.
Su marido, el conocido fotógrafo de escalada Nathal Welton, realizó un magnífico y humano reportaje de la recuperación de Rannveig. Ocho meses después estaba escalando 8a+ (5.13c).
En enero de 2018 volvió al lugar del accidente, donde escaló de nuevo la vía donde casi pierde la vida. Explica la noruega: «Me sentí realmente aliviada, con una sensación de perdón hacia la anterior Rannveig».
En este emocional vídeo que compartimos, Rannveig explica las sensaciones de ese 26 de abril de 2012 que cambió su vida.