24 de noviembre de 2024

Proyecto solidario

Construir un rocódromo para las personas refugiadas en Katsikas

Tres organizaciones unen fuerzas para construir un plafón de boulder en el campo de personas refugiadas en Katsikas, al norte de Grecia.

Campo de refugiados en Katsikas
Espacio donde se construirá el plafón de boulder en el campo de personas refugiadas en Katsikas. Foto / Col. Maika'i
 

Una semana antes de la cuarentena conocimos a gente bonita y un año después por fin pudimos unir fuerzas para hacer un sueño realidad. El pasado 22 de febrero nuestros sueños echaron a volar y el proyecto de la construcción de un plafón de boulder para las personas refugiadas en el campo de Katsikas, al norte de Grecia, comenzó a rodar.

Con muchas ganas, energía y empeño, detrás de esta iniciativa se encuentran tres organizaciones que decidieron empezar a colaborar para poder acercar el deporte de la escalada a los refugiados de Katsikas: Maika’i, Habibi.Works y KOIZ. Estas tres entidades colaboran entre sí con el fin de enseñar a las personas refugiadas la práctica de boulder y conectarlos con la comunidad de escalada de la región de Epirus.

El contexto

En el campo de Katsikas ahora viven aproximadamente 1.100 personas refugiadas que, de media, llevan alrededor de dos años ya en un proceso de migración forzosa. Son personas que no han llegado a Grecia en business class. Su proceso migratorio viene, generalmente, marcado por la violencia, miedo y largas marchas atravesando diferentes fronteras que muy a menudo no son seguras. En este contexto, el proyecto conjunto de Maika’i, Habibi.Works y KOIZ es una iniciativa colaborativa que aspira a facilitar un espacio de deportes seguro a las personas que, simplemente, quieren y necesitan desactivar todas sus alarmas, después de tan largo viaje.

¿Qué vamos a hacer?

La construcción del plafón consistirá en levantar una estructura de metal que soporte un tejado, a partir de la que se construirán dos paredes de hasta 4 metros de alto con diferentes desplomes. En el interior de este complejo quedará un espacio cubierto para practicar diferentes actividades físicas.

¿Y después?

Tras este primer episodio de construcción, el equipo de Maika’i se encargará de formar a personas en la enseñanza de la escalada y generará un flujo de voluntarios que continúe realizando actividades relacionadas con esta actividad. La filosofía del proyecto se basa en construir una comunidad alrededor del espacio de boulder, involucrando a la comunidad escaladora de la ciudad cercana, Ioannina y, gracias a ello, crear nuevas relaciones y lazos entre las personas refugiadas y las locales.

 

[Colabora en el proyecto]

 

¿Quién apoya el proyecto desde Grecia? 

Habibi.Works es un espacio para las mentes creativas en Katsikas. La filosofía de trabajo de esta organización de origen alemán rehúye del cliché de los refugiados como víctimas o receptores pasivos de ayuda externa y se sitúa dentro del movimiento makerspace: cada individuo es capaz de aportar ideas y generar sus propias soluciones en lugar de esperar a que la ayuda venga de fuera.

Junto a una pequeña asociación vasca, KOIZ (Center for Postcolonial Studies), han ido habilitando un espacio seguro para las mujeres a través del proyecto Habibti.Trains (women’s sports).

Sobre Maika’i

Maika’i surge a partir de la idea de seis jóvenes apasionados por la escalada, decididos a acercar este deporte y todo lo que le rodea a todo el mundo.

El equipo de Maika’i utiliza la escalada como herramienta vehicular para alcanzar un estado de bienestar con uno mismo y con el resto de personas. La escalada crea una comunidad que comparte valores como la autosuperación, el trabajo en equipo, la motivación, el esfuerzo, la tolerancia, la empatía, etc… Todos ellos extrapolables a la vida real.

Hasta el momento, Maika’i ha desarrollado un proyecto en Uganda: Kumwenya Climbing Wall. Esta iniciativa se llevó a cabo en el colegio Kumwenya Eco School, de la ONG Kelele África, en Kimya. Fue un orgullo para el equipo poder transmitir la pasión por este deporte a los niños y niñas del colegio, que nos mostraron una actitud implacable ante la vida. Actualmente, los estudiantes del colegio Kumwenya Eco School están volviendo progresivamente a las clases y si el contexto de la presente pandemia lo permite, es posible que Maika’i vuelva allí este verano para continuar lo que empezó.

 

¿Necesitas más información?

Maika’i: @maikai_projects

KOIZ: @koizpostcolonial

Habibi.Works: @habibiworks

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