22 de noviembre de 2024

Actualidad

Dai Koyamada establece ‘Ochimizu’, una de sus líneas más duras

Dai Koyamada haciendo boulder en Gero
Dai Koyamada en 'Ochimizu', entre el 8C y el 8C+. Foto / Col. Dai Koyamada
 

Dai Koyamada ha realizado la primera ascensión de Ochimizu, en Gero (Japón). El carismático escalador japonés de 44 años no ha graduado el problema después de encadenarlo, pero ha dicho que «está entre mis cinco mejores primeras ascensiones». Tomando esta declaración como referencia y repasando el historial de Koyamada, el problema podría estar en una dificultad entre el 8C y el 8C+.

Ochimizu se encuentra en la misma zona donde Koyamada estableció Nayuta en abril de 2017, para el que propuso 8C+. Esta es una de las líneas más difíciles encadenadas por el nipón, que más recientemente, en noviembre de 2019, también se apuntó la primera ascensión de Sanctum, en la zona de Shirakawa.

La historia de Ochimizu

Koyamada empezó a probar Ochimizu en mayo, aunque conocía el bloque desde hacia cinco años, cuando se lo enseñó un escalador local. En su momento descartó empezar a probarlo ya que unas rocas impedían progresar por el techo, aunque el japonés explica que «las presas de inicio eran bastante obvias».

Transcurridos cinco años «y habiendo escalado muchos problemas duros, como Nayuta, y convertirme en un adepto a desarrollar nuevas zonas de boulder, aquel techo desplomado volvió a mi memoria. Volví al lugar y vi aquella pieza de roca con otros ojos. Surgió la excitación al ver que la línea seguía sin haberse escalado. Descubrí una minúscula pero útil regleta en una sección que me había parecido lisa anteriormente. Y sobre las rocas que bloqueaban la progresión por el techo, sabía que con las herramientas correctas podría moverlas. Después de cuatro días de trabajo, el bloque estaba en un estado que podía empezar a probar», relata Dai.

«He llegado a una edad en que el rendimiento disminuye a diario, pero a pesar de ello he logrado resolver este problema a tiempo»

«Empecé a probar el problema a mediados de mayo. Las temperaturas ya eran muy altas y pasé casi todos los días probando los movimientos. Podía hacerlos todos y la motivación era alta cuando finalizó la temporada primaveral», sigue explicando el japonés.

Con la llegada del otoño de 2020 Koyamada arrastraba una lesión en un dedo, aunque se encontraba en plena forma para probar el proyecto, según sus propias declaraciones. El círculo se cerró el 15 de noviembre, día del encadenamiento, el que además estaba presente el escalador local que le había enseñado el bloque, Mr. Imai.

Dai Koyamada le ha puesto Ochimizu a su última gran ascensión, una palabra que se podría traducir como «fuente de juventud». «He llegado a una edad en que el rendimiento disminuye a diario, pero a pesar de ello he logrado resolver este problema a tiempo», reconoce.